Tarde o temprano tendrás que enfrentarte a una situación casi inevitable: “Mi coche no arranca“. ¿Qué hacer en esta tesitura? En este artículo te damos las claves para identificar el problema y solucionarlo lo antes posible.
Si al poner la llave y girarla el coche no activa el contacto te encuentras con un problema de electrónica.
Por norma general, aunque la batería se descargue, nunca lo hace del todo. De esta forma, siempre va a mostrar algún piloto o luz. Si el coche no muestra absolutamente nada, casi con total seguridad podemos descartar la batería.
El origen de los fallos eléctricos es difícil de detectar. Podría ser un fusible, un problema de la centralita o del propio sistema eléctrico.
Si el salpicadero actúa al conectar el encendido y se enciende la luz de advertencia, pero el motor no se mueve al girar la llave, entonces el motor de arranque está agarrotado o simplemente no funciona.
En el pasado, los fallos de los motores de arranque eran bastante comunes, y una solución era golpear el propio motor de arranque con un instrumento robusto mientras un ayudante giraba la llave en el encendido, o intentar mover las marchas empujando el coche mientras estaba en marcha.
Sin embargo, en nuestra sociedad digital electrónicamente avanzada, estas soluciones analógicas ya no son viables. Tampoco es fácil detectar un fallo. En este caso, al igual que en tantos otros, lo mejor es llamar la grúa y poner el asunto en manos de un taller especializado.
En este caso el motor recibe la corriente necesaria para hacerlo funcionar, pero no lo consigue.
El problema puede deberse principalmente a la falta de combustible o a la suciedad que se ha introducido en los inyectores e impide que los cilindros cumplan su función correctamente. Intenta exceder la reserva en la medida de lo posible.
También podría ser un problema eléctrico que impide el encendido en la cámara de combustión (el típico fenómeno de “no chispa”), o de una bomba defectuosa que alimenta de combustible.
Sin embargo, cuando el motor de arranque hace su trabajo y el motor se pone en marcha pero se ralentiza gradualmente, aparece la alternativa clásica. La batería KO.
Si, al girar la llave en el contacto, la velocidad de arranque cae gradualmente y, cuando intentas girar la llave de nuevo, la luz del testigo de instrumentos se apaga porque no tiene suficiente potencia para arrancar o revolucionar el motor, la batería te está diciendo que ha tenido suficiente. La batería dijo “hasta aquí”.
A menos que la batería esté fuera de alcance para poder manipularla fácilmente, la operación de montaje y desmontaje no debería durar más de unos minutos. Basta con quitar unas tapas, desenroscar las abrazaderas y retirar el soporte que sujeta la batería.
Sin embargo, desde Renovarcar.net somos partidarios de solicitar el servicio a un profesional debido a que saben dónde hay que tocar y a que pueden salvarte de un apuro.
De hecho, existen soluciones rápidas de baterías, como baterias a domicilio Madrid, que acuden al punto que necesites en menos de 30 minutos para hacer el servicio, evitando así tener que perder una mañana o tarde en ir al taller.
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