La DGT sigue explorando vías alternativas para fomentar el uso del transporte público en las ciudades. Una de las tareas que la DGT viene realizando a lo largo de 2021 es la de actualizar la información de cada vehículo para las administraciones de cada ciudad, con el objetivo expreso de utilizar estos datos para ajustar los precios de los parquímetros.
En determinadas urbes, como por ejemplo Madrid, el precio del aparcamiento se regulaba en función de la cantidad de gases contaminantes emitidos: los que tenían una pegatina 0 pagaban mucho menos por aparcar que los que tenían una pegatina C. Esta vez, la DGT exige que los vehículos más grandes, como los todoterrenos, SUV o los monovolúmenes, paguen más que los coches más pequeños cuando aparcan en la calle.
La intención es que esta medida entre en vigor en 2022, pero esta decisión se dejará en manos de los consejos regionales que regulan las tarifas de aparcamiento. El SUV es un tipo de coche que tiene una gran demanda en España, representando más del 40% de las ventas.